El Hospital Británico fue pionero al llevar a cabo el primer implante coclear en el país, a un adulto, en el año 1994, y a un niño, en el año 1999, y también en la detección de la hipoacusia o sordera neonatal, desde muchos años antes de que por ley fuera obligatorio hacerlo.
Fue el primer hospital en Uruguay en el que se implantó el tamizaje universal, a cada niño que nace, lo que es sumamente importante para la detección de la hipoacusia.
Hasta el momento, el Programa de Implantes Cocleares del Hospital Británico lleva realizados en el país unos 500 procedimientos, por lo que el equipo cuenta con una vasta experiencia en la materia y con la mejor tecnología disponible, de forma de optimizar los resultados y garantizar la mayor de las seguridades para el paciente .
Los especialistas del programa señalan la importancia de que los niños adquieran la audición de forma de “ser capaces de entender y desarrollar lenguaje” y de que los adultos “pueden recuperar la habilidad de entender palabras y lenguaje y manejarse en el mundo sonoro”.
Por este motivo se recomienda la consulta oportuna, es decir acudir al otorrinolaringólogo cuando se padece una pérdida rápida de audición, en el caso de los adultos, o frente a la constatación de trastornos en la adquisición y desarrollo del lenguaje, en el caso de los niños.