Un club que apuesta a la donación de sangre como actitud frente a la vida

MEDIO DE PUBLICACIÓN:
14.06.18 Diario EL OBSERVADOR

El Club de Donantes del Hospital Británico trabaja desde 1998 en concientizar a la población sobre la importancia de donar sangre de forma voluntaria y reiterada. En la historia de la medicina hay descubrimientos que se festejan y se recuerdan más que otros. La creación de la primera vacuna, por ejemplo, o la invención de la penicilina. Ambos fueron pasos enormes dentro de la ciencia médica, y en mayor o menor medida, hasta los menos avezados en estos campos los recuerdan como pilares del desarrollo médico. Sin embargo, hay otros menos populares e igual de importantes que pasaron más desapercibidos. Entre ellos está el descubrimiento que hizo Karl Landsteiner en 1909. Después de varios años de estudio, el científico austríaco encontró que entre las personas había cuatro tipos de grupos sanguíneos diferentes. Lo que a simple vista parecía ser un episodio menor terminó cambiando la historia de la medicina. A partir de ese momento, las transfusiones de sangre pasaron a ser mucho más sencillas y mucho menos peligrosas, ya que la compatibilidad de la sangre y el receptor se pudo comenzar a saber de antemano. Para recordar lo que el descubrimiento de Landsteiner logró,la Organización Mundial de la Salud declaró el 14 de junio como el Día mundial de la donación de sangre, una fecha a la que, en Uruguay, el Hospital Británico se adhiere impulsando una organización que viene trabajando en el tema desde 1998: el Club de Donantes de Sangre. A través de esta sociedad, la institución pretende consolidar una comunidad de donantes voluntarios y recurrentes que donen sangre al hospital al menos una vez al año, de manera de contar con un stock de sangre y elementos hematológicos estables a disposición de sus usuarios. Según explicó la doctora Lourdes Viano, jefa del departamento de Medicina Transfusional, fomentar este club es fundamental para el hospital, pero también para concientizar a la población de que la donación de sangre voluntaria es primordial para la salud del país. "Buscamos el donante voluntario y reiterado. Esta persona, que toma dentro de sus actitudes de vida la donación de sangre, está informado y está educado en la donación y en lo que implica la responsabilidad de donar para asegurar el bien del otro. Tener un número estable y conocido de donantes nos da un índice mayor de seguridad a la hora de las transfusiones", comentó Viano. En el departamento se extrae y se almacenan todos los tipos de sangre, pero también se seleccionan y fraccionan otros componentes que se pueden encontrar en el torrente sanguíneo de una persona y que pueden hacer falta tras una intervención quirúrgica u otro tipo de tratamiento, como los glóbulos, el plasma o las plaquetas. La donación de sangre se divide en dos partes previas, que son una entrevista con el donante y un examen físico. El hospital necesita de la sinceridad total del voluntario para determinar si la extracción no producirá ningún daño en su organismo y si no se pone en riesgo la salud del eslabón más débil del proceso, que es el receptor. "La entrevista y el examen son un complemento para distintos análisis que luego se realizan con tecnología de ultimo nivel, que se pone en marcha para hacer los estudios, ya sea para determinar enfermedades de transmisión sanguínea o para realizar análisis inmunohematológicos. Es una gran sociedad que se conforma entre la comunidad y nosotros para lograr el beneficio de aquel que lo está necesitando". 20 años de donación Al Club de Donantes, que cumple este año dos décadas de trabajo, son invitados a participar los afiliados voluntarios que llegan a donar para reponer el stock del hospital, pero también los funcionarios del hospital y sus allegados. Desde el comienzo, el número de integrantes ha ido creciendo, algo que Viano relacionó con el trabajo de educación que la institución viene desarrollando, aunque todavía debe fortalecerse para derribar ciertos miedos que rondan al acto de donar sangre. Actualmente, el club cuenta con más de 700 donantes, entre afiliados y funcionarios del hospital. "El donante concurre a donar de forma reiterada a nuestro departamento, y periódicamente recibe información desde el Hospital Británico sobre la importancia del acto, del voluntariado. Es información que educa a la persona, y entonces sabemos que cuando vienen a donar lo hacen a conciencia y conociendo los requisitos. A partir de allí comienza a existir una donación más segura y nos llega un producto que sabemos que está en condiciones". En caso de necesitar de los servicios del banco de sangre del hospital, por ser miembros del Club y donar reiteradas veces los usuarios se benefician con transfusiones que no deberán reponer en el acto para él y su familia, ya que ellos mismos habrán colaborado con la institución de manera previa. "Ellos generan ese beneficio, pero en realidad el beneficio principal es que el Hospital Británico tenga dentro de su estructura un grupo de donantes solidarios reiterados que nos hagan enaltecer la solidaridad de nuestra comunidad". Viano aseguró que desde la creación del Club se ha realizado un "trabajo de hormiga", pero que poco a poco va dando frutos. Para ello, sin embargo, es crucial que la solidaridad de los uruguayos y de los usuarios del Hospital Británico se mantenga y se amplíe con el tiempo. "Nuestra comunidad crece poco a poco. Esto no es un trabajo solo del Departamento de Medicina Transfusional, sino de todo el Hospital. Tenemos la necesidad y los conocimientos, pero hay que trabajar en equipo. Y el Hospital Británico así lo hace. Todavía queda mucho trabajo, pero con el equipo que se formó en la institución, que ha puesto todas sus herramientas a disposición, vamos a lograr los objetivos", concluyó la especialista.

  • Comparte!